El plástico proporciona el viento a favor
Es probable que cada vez más empresas opten por invertir en la economía circular, impulsada, entre otras cosas, por los cambios en el comportamiento de los consumidores y las nuevas regulaciones. La empresa de investigación de mercado Gartneriii estima que alrededor del 60 % de las empresas globales lograrán un crecimiento rentable a través de cadenas de suministro circulares para 2026. En la actualidad, estas inversiones solo representan el 3 % del gasto de la economía, que sigue siendo lineal. Sin embargo, la búsqueda de recuperación ha comenzado y la política está ayudando en parte con fuerza. Por ejemplo, Francia promueve la reparación de productos por ley. Los aparatos eléctricos deben marcarse en este país con un índice de reparación. Este muestra a los consumidores lo fácil que es reparar un producto. Además, el Estado paga una bonificación por reparación de hasta varias decenas de euros.
Cómo invertir en la economía circular
A la hora de crear un universo de inversión hemos tomado como base el principio de las cuatro R. En este espectro caben muchos subtemas relacionados con el reciclaje de plásticos o biorreciclaje, el diseño y la vida útil de los productos, una mayor eficiencia en el proceso de producción o modelos de negocio de leasing (véase el siguiente gráfico). También hemos definido tres categorías de empresas para nuestro enfoque de inversión: Proveedores de soluciones que ofrecen productos y servicios adaptados a los retos de la economía circular. También los denominados capacitadores, que proporcionan herramientas, software y tecnología para impulsar la economía circular. Y, por último, los usuarios líderes que promueven activamente las iniciativas de economía circular, las involucran y las invierten en los procesos.